Los fieles de la iglesia matriz y los organistas platenses, así como los amantes de la música, han comenzado a recaudar fondos para la restauración mediante un bono contribución pro órgano. El prestigioso organero Enrique Rimoldi ha presupuestado una primera etapa en $360.000.
Bono contribución pro órgano
El instrumento alemán ubicado en la tribuna alta de la iglesia catedral se encuentra en un estado de lamentable deterioro. Con fallas en su sistema de transmisión, desafinación de varios tubos, averías en los fuelles, entre otros problemas.
Con dicho instrumento se han llevado a cabo innumerables conciertos y masterclass de música italiana, así como el protagonista del primer vespro musicale organizado por la Asociación de la Regione Toscana en el año 2020.
Más allá del servicio litúrgico, principal función para la que fue concebido, es un instrumento de gran importancia y forma parte del patrimonio cultural de los platenses.
Por esta razón, y con la venia de las autoridades eclesiásticas, los fieles y músicos de nuestra ciudad han puesto al alcance de quienes deseen colaborar el bono contribución pro órgano.
Trabajos de organería por $250.000
El presupuesto inicial es de $360.000, cifra que fijó el maestro organero Enrique Rimoldi, célebre por la construcción del órgano del bicentenario de la catedral de Buenos Aires junto al ingeniero Jorge Franco.
Los organistas destacan que, el presupuesto en moneda nacional y que se mantendría sin alteraciones hasta el mes de marzo, es una gran contribución del experto Rimoldi. La devaluación constante de nuestra moneda no garantiza la sustentabilidad lucrativa de la actividad. Sin embargo, como amante de la música y benefactor de sus colegas, el organero ofrece una posibilidad única de poner en valor el precioso instrumento.
No pudiendo extender mas el plazo a la espera de trámites burocráticos y habiendo programas musicales que se anhelan desde el fin de las restricciones, se ha decidido pedir la colaboración de aquellos que aman el patrimonio cultural de la ciudad.
Los bonos pro órgano se ofrecerán el iglesia catedral finalizados los oficios religiosos, especialmente a partir del día 8 de diciembre próximo.
Necesidad de permanente manutención
Un instrumento de estas características requiere de una permanente manutención que garantice una sonoridad plena, así como la posibilidad de una fluida ejecución del instrumentista.
El órgano de la catedral sirve al culto y a la formación musical de varios organistas. Así tambipén como punto de encuentro para la colectividad italiana en los últimos años gracias a las audiciones que se llevan a cabo semanalmente.
No es desdeñable que los autores italianos hayan tenido siempre el privilegio de ser los protagonistas de las audiciones. También fueron ítalo-argentinos los músicos que han interpretado sus obras: principalmente el maestro Colabella, Lombardi, Bellisomi, entre otros.
El trabajo de mantenimiento y restauración de un instrumento de tales magnitudes requiere de mucho esfuerzo y dedicación durante varias horas y días. Sin contar, claramente, con que lo principal es el conocimiento de la materia y la experiencia del organero.
Por lo general, este tipo de trabajos suele presupuestarse en dólares, lo que dificulta aún más el acceso a este servicio por parte de particulares. Sin embargo, el presente presupuesto es un aliciente que despertó el entusiasmo y la esperanza de los ciudadanos. Los últimos añoran disfrutar del esplendor sonoro del Ibach de dos manuales y pedaleras que lleva un buen tiempo en agonía.
Ojalá puedan hacerse los debidos trabajos para recuperar el órgano